Continuación:
Daniel. 4:22-24. Tú mismo eres, oh rey, que creciste, y te hiciste fuerte, pues creció tu grandeza, y ha llegado hasta el cielo, y tu señorío hasta el cabo de la tierra. Y cuanto a lo que vio el rey, un vigilante y santo que descendía del cielo, y decía: Corta el árbol y destruidlo; mas la cepa de sus raíces dejaréis en la tierra, y con atadura de hierro y de metal en la hierba del campo; y sea mojado con el rocío del cielo, y su parte sea con las bestias del campo, hasta que pasen sobre él siete tiempos: Esta es la declaración, oh rey, y la sentencia del Altísimo, que ha venido sobre el rey mi señor.
Conociendo la historia de los Asirios y los Babilónicos, que su mano no temblaban ante la adversidad, que eran crueles y cortaban las cabezas de sus enemigos. Vemos al rey tenso y preocupado. En Daniel vemos la prudencia pero no obstante, él tenía que decir la verdad, cualquiera que fueran las consecuencias.
Llanamente Daniel le dijo que el árbol representaba al mismo rey Nabucodonosor. Por ironia que sea la vidad, la metáfora del árbol hace alusión al carácter presuntuoso del rey, y compara a Nabucodonosor con Adán, en su función de administrador de lo que Dios le ha dado(Gén. 1;28).
También hace referencia al árbol de la vida y del conocimiento puesto por Dios. (Gén.2:9; 3:3).
Todo este sinvolismo apunta a su superioridad, su gandeza. Tu grandeza, ha llegado hasta el cielo. El profeta describió la grandeza de Nabucodonosor y que su reino se extendería hasta Egipto. El consejo que Daniel le dio, eventualmente indica que el rey todavía podía evitar el castigo que lo amenazaba.
Dios tenía la intención de que el rey aprendiera cierta lección de este sueño: o, si no, de la experiencia que se le predecía. Este árbol que se eleva hasta los cielos, protector y majestuoso, en realidad es un insulto al Creador del Universo. El orgullo del rey es proporcional a la altura del árbol, la imagen que levanto en la esplanada representaba lo mismo.
¿ Que lección hay en este verso para los hombres que tienen poder en este siglo XXI Y XXII? Reyes, Presidentes, Dictadores, llenos de orgullo y de vanidad, y lo malo es que creen que su reino temporal durara toda la vida, y no sabe que sus vidas son como una e quimera, un lapso en el tiempo y en la inmensidad del espacio, y que un día serán juzgados por el Rey del Universo.
Dios nos está transmitiendo atraves del salmista lo siguiente: El fin de todo el discurso oído es este: Teme a Dios, y guardad sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, el cual se hará sobre toda cosa oculta, buena o mala.
La pregunta que nos podemos hacer es : ¿Qué intentaba Dios que el rey comprendiera? ¿Por qué razón deseaba Dios esto? La respuesta la encontramos en los versos siguientes. La soberanía de Dios era la lección que quería transmitir desde el principio. Recordemos que unos treinta años antes, Daniel le había dicho al rey: El Dios del cielo te ha dado el reino(Dan. 2:37,38).
Cierto es que el rey Nabucodonosor entiende la presencia de los seres celestiales, que su papel en este mensaje es muy importante, y que el gran Dios del cielo tiene un propósito para el, y para su reino. Los Vigilantes jugaban un papel importante en la mitología, el comentario de zoroástrico del Zend-Avesta a´sí lo demuestra.
Recordemos que Nabucodonosor había levantado una imagen de oro, esta imagen representa a un solo reino, él quería ser indenpendiente del Altísimo. No representaba a los cuatro reinos de la primera imagen; después los dedos de los pies que representaban a los diez reinos de Europa. En otras palabras, había reusado aceptar la soberanía de Dios.
UN NUEVO AMANECER.
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“
*Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la
tierra tembló, y las rocas se partieron” Mat. 27:51.*
*En el templo hay dos divi...
Hace 9 horas
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